Es común esa contradicción en nosotros. La comodidad, seguridad y tranquilidad que nos da la soledad. Y por otro lado el anhelo de compañía, de sentirse querido y desear tener quien te acompañe de vez en cuando. Las personas, con sus líos, sus actitudes desagradables, las sorpresas, el compromiso; sabes que una amistad no es "gratis", que debes "estar ahí" para la otra persona, y eso nos hace vulnerables, ya que somos frágiles, no sabes decir que no, no toleras el conflicto. Todo esto generalmente pasa en nuestro subconsciente claro. Las relaciones con las personas se vuelven perturbadoras, y optas por evitar. Y los demás, también de forma subconsciente, perciben esto; no pasamos tan desapercibidos como creemos.
Somos obsesivos. Acerca de nosotros mismos y de los demás. Elaboramos mundos de fantasía, desarrollamos teorías funestas, autocumplidas. Establecemos categorías... los que tienen vida social y los que no, los "normales" y los "bichos raros", los que agradan al resto y lo que no sabemos agradar. Y por alguna razón nos gusta torturarnos, darle vueltas a nuestra desdicha.
A decir verdad no se que consejo darte
@Vivi Escobar. Te podría decir que a veces pienso que las relaciones no valen la pena, que las personas son un lio. También te podría decir que cada minuto de vida es precioso y no vale la pena gastarlo en llantos inútiles, que hay muchas otras cosas que la vida nos ofrece ademas de lo social. O quizás que luches, experimentes, hagas cosas distintas, que busques tu camino con determinación, que no te conformes. O que quizás estas deprimida y deberias buscar ayuda profesional. En fin. Que tengas un buen día.
