Nawin
Usuario poco activo
Hola a todos,
hace poco estaba indagando por internet para tratar de paliar algunos de los problemas que tengo desde hace tiempo con algunos aspectos de mi personalidad, y me encontré de golpe con el TPE. No podía creerme lo identificada que me sentía con todos los puntos que lo definían, y buscando un poco más encontré este foro. Creo que compartirlo con otras personas puede ser muy beneficioso (para empezar sólo escribir este post para comunicarme con otros ya me ha costado lo mío, lo considero un gran paso.) Aclaro, aunque que se deduce de lo anterior, que no estoy diagnosticada por ningún psicólogo, ni especialista ni nada, pero la verdad es que llamar para concertar una cita me aterra, ir a conocer al psicólogo me aterra, y pensar en tener que verlo muchas más veces me aterra, así que en cualquier caso no creo que me vayan a diagnosticar nunca
Tan sólo voy al médico (de medicina general me refiero) cuando siento que es algo realmente grave, cosa que no ha sucedido a menudo, y siempre convenzo a alguien para que al menos me concierte la cita y no tener que hacer yo la llamada telefónica...
Os cuento un poco mi vida:
Empezando por el principio, cuando era niña y adolescente desarrollé una fuerte aversión a relacionarme con mis compañeros de clase, en gran medida porque el ambiente era realmente asfixiante. Muchos de ellos individualmente no eran tan terribles, pero dentro de la clase como grupo había una jerarquía muy rígida, donde los que no estaban arriba eran insultados y menospreciados sistemáticamente, tanto por los que sí estaban en lo alto de la pirámide (por miedo a perder ese estatus) como por otros que recibían el mismo trato (para intentar ganar una mejor posición y recibir menos acoso que los demás). Yo siempre traté de pasar desapercibida, destacar lo menos posible y mantener un perfil bajo, pero incluso así no podía evitar que mis compañeros me machacasen en mayor o menor medida todos los días. Con los años me he dado cuenta de que el problema no era mío, no importaba lo que hiciera, iban a intentar hundirme de todas formas y lo que debería haber hecho es haberme defendido en vez de tratar de esconderme... Pero supongo que eso es algo que he sabido con la experiencia de los años.
Después pasé a la universidad, donde entablé algunas relaciones superficiales con algunos compañeros porque me forcé a hacerlas, dado que como faltaba mucho a clase (odiaba ir a clase a encontrarme con un montón de desconocidos) si no hubiese tenido a nadie a quien preguntar las cosas típicas de los estudios no hubiera habido manera de aprobar... pero apenas hablaba con nadie.
Hasta este momento, todo lo que he escrito parece terrible (y en muchos puntos lo era), pero hubo algunas personas con las que sí tenía un vínculo estrecho. En concreto conocí a un chico que a pesar de mi desconfianza, mis inseguridades y mi carácter difícil me demostró que podía confiar en él, y sin lugar a dudas si he llegado a conquistar algunos de mis miedos, incluso aunque sea parcialmente, ha sido gracias a él.
Es por ello que, aunque todavía tengo muchos problemas debido a que trato de relacionarme con los que están fuera de mi círculo íntimo lo menos posible, de vez en cuando se me cruza un cable y hago algo "valiente" casi sin pensar, porque de alguna manera su apoyo me da fuerzas para hacer cosas que de otra forma no me habría atrevido. "Ataques de locura" es como yo llamo a estos momentos :D
No os voy a dar (mucho) más la lata con mi vida (los que hayan llegado hasta aquí después de la biblia que he escrito tienen mucho mérito), pero quería acabar con una pregunta para buscar consejo. En mi trabajo, o incluso para amigos no cercanos, NECESITO responder mensajes y hacer llamadas, sobretodo lo primero. Cuando recibo un mensaje paso por una serie de fases: primero me alegro ("qué bien que pensaron en mí"), después me siento incómoda ("bueno, pero ahora mismo no sabría dar una buena respuesta, mejor luego") y al final acabo estresadísima y con mucha ansiedad ("llevan TRES semanas esperando mi mensaje y no les he dicho nada... Tengo que responder, pero me veo incapaz"). Y cuanto más tiempo pasa más vergüenza me da no haber escrito antes, así que más me agobio y más tardo, es un círculo en el que me ahogo constantemente.
Además me siento idiota: quiero más que nada en el mundo que me escriban, me hace feliz que se acuerden de mí tanto como amiga como porque les guste mi trabajo, pero cuando recibo un mensaje me aterra dar una respuesta que demuestre la escasa habilidad que tengo. Y si le doy más vueltas, al final llego a la conclusión de que quien me escribe es porque quiere sacar algo de mí (pedirme algo, ya sea personal o profesional).
Sé que no existe una receta milagrosa para nada, pero si alguien ha intentado o conoce algo que dé resultado para romper esta barrera, le agradecería muchísimo que lo compartiera conmigo :)
Espero no haberos aburrido mucho... Y gracias por adelantado.
hace poco estaba indagando por internet para tratar de paliar algunos de los problemas que tengo desde hace tiempo con algunos aspectos de mi personalidad, y me encontré de golpe con el TPE. No podía creerme lo identificada que me sentía con todos los puntos que lo definían, y buscando un poco más encontré este foro. Creo que compartirlo con otras personas puede ser muy beneficioso (para empezar sólo escribir este post para comunicarme con otros ya me ha costado lo mío, lo considero un gran paso.) Aclaro, aunque que se deduce de lo anterior, que no estoy diagnosticada por ningún psicólogo, ni especialista ni nada, pero la verdad es que llamar para concertar una cita me aterra, ir a conocer al psicólogo me aterra, y pensar en tener que verlo muchas más veces me aterra, así que en cualquier caso no creo que me vayan a diagnosticar nunca

Tan sólo voy al médico (de medicina general me refiero) cuando siento que es algo realmente grave, cosa que no ha sucedido a menudo, y siempre convenzo a alguien para que al menos me concierte la cita y no tener que hacer yo la llamada telefónica...
Os cuento un poco mi vida:
Empezando por el principio, cuando era niña y adolescente desarrollé una fuerte aversión a relacionarme con mis compañeros de clase, en gran medida porque el ambiente era realmente asfixiante. Muchos de ellos individualmente no eran tan terribles, pero dentro de la clase como grupo había una jerarquía muy rígida, donde los que no estaban arriba eran insultados y menospreciados sistemáticamente, tanto por los que sí estaban en lo alto de la pirámide (por miedo a perder ese estatus) como por otros que recibían el mismo trato (para intentar ganar una mejor posición y recibir menos acoso que los demás). Yo siempre traté de pasar desapercibida, destacar lo menos posible y mantener un perfil bajo, pero incluso así no podía evitar que mis compañeros me machacasen en mayor o menor medida todos los días. Con los años me he dado cuenta de que el problema no era mío, no importaba lo que hiciera, iban a intentar hundirme de todas formas y lo que debería haber hecho es haberme defendido en vez de tratar de esconderme... Pero supongo que eso es algo que he sabido con la experiencia de los años.
Después pasé a la universidad, donde entablé algunas relaciones superficiales con algunos compañeros porque me forcé a hacerlas, dado que como faltaba mucho a clase (odiaba ir a clase a encontrarme con un montón de desconocidos) si no hubiese tenido a nadie a quien preguntar las cosas típicas de los estudios no hubiera habido manera de aprobar... pero apenas hablaba con nadie.
Hasta este momento, todo lo que he escrito parece terrible (y en muchos puntos lo era), pero hubo algunas personas con las que sí tenía un vínculo estrecho. En concreto conocí a un chico que a pesar de mi desconfianza, mis inseguridades y mi carácter difícil me demostró que podía confiar en él, y sin lugar a dudas si he llegado a conquistar algunos de mis miedos, incluso aunque sea parcialmente, ha sido gracias a él.
Es por ello que, aunque todavía tengo muchos problemas debido a que trato de relacionarme con los que están fuera de mi círculo íntimo lo menos posible, de vez en cuando se me cruza un cable y hago algo "valiente" casi sin pensar, porque de alguna manera su apoyo me da fuerzas para hacer cosas que de otra forma no me habría atrevido. "Ataques de locura" es como yo llamo a estos momentos :D
No os voy a dar (mucho) más la lata con mi vida (los que hayan llegado hasta aquí después de la biblia que he escrito tienen mucho mérito), pero quería acabar con una pregunta para buscar consejo. En mi trabajo, o incluso para amigos no cercanos, NECESITO responder mensajes y hacer llamadas, sobretodo lo primero. Cuando recibo un mensaje paso por una serie de fases: primero me alegro ("qué bien que pensaron en mí"), después me siento incómoda ("bueno, pero ahora mismo no sabría dar una buena respuesta, mejor luego") y al final acabo estresadísima y con mucha ansiedad ("llevan TRES semanas esperando mi mensaje y no les he dicho nada... Tengo que responder, pero me veo incapaz"). Y cuanto más tiempo pasa más vergüenza me da no haber escrito antes, así que más me agobio y más tardo, es un círculo en el que me ahogo constantemente.
Además me siento idiota: quiero más que nada en el mundo que me escriban, me hace feliz que se acuerden de mí tanto como amiga como porque les guste mi trabajo, pero cuando recibo un mensaje me aterra dar una respuesta que demuestre la escasa habilidad que tengo. Y si le doy más vueltas, al final llego a la conclusión de que quien me escribe es porque quiere sacar algo de mí (pedirme algo, ya sea personal o profesional).
Sé que no existe una receta milagrosa para nada, pero si alguien ha intentado o conoce algo que dé resultado para romper esta barrera, le agradecería muchísimo que lo compartiera conmigo :)
Espero no haberos aburrido mucho... Y gracias por adelantado.